Dado que la adicción es una enfermedad que afecta al cuerpo y a la mente, la FSA trata la adicción con medicación y asesoramiento.
El abuso y la dependencia de sustancias son aspectos del trastorno por consumo de sustancias, que se mide en un continuo de leve a grave. A menudo, este trastorno tiene su origen en un trauma que no se ha abordado adecuadamente. El Programa de Trastornos por Consumo de Sustancias de la FSA ofrece un tratamiento holístico adaptado a las necesidades individuales.
A través de la terapia individual y de grupo, y a menudo con el apoyo de la medicación, los pacientes de FSA aprenden habilidades de afrontamiento saludables y mejoran la confianza en sí mismos.
A nadie se le negará el acceso a los servicios por no poder pagar. Existe un programa de descuentos/cuotas variables basado en el tamaño de la familia y los ingresos.
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